La Policía Nacional ha detenido a tres sospechosos del crimen, cometido el pasado 11 de mayo
02.10.10 - 01:00 - RICARDO FERNÁNDEZ MURCIA. / La Verdad
Mientras el joven de Archena sujetaba a la víctima, el italiano le asestó varios golpes de kárate en el cuello
Luego lo asfixiaron poniéndole una bolsa de plástico en la cabeza
«Conozco un viejo en Molina de Segura que está forrado de pasta». Con esa frase, pronunciada por un italiano de 36 años en los primeros días del pasado mayo, se activaba una perversa e invisible maquinaria que acabaría, poco después, con el brutal asesinato de un anciano en Molina de Segura.
Este hombre, quien aparentemente venía dedicándose desde tiempo antes a vender sus servicios sexuales a varones de Murcia y alrededores, acababa de conocer a un joven de Archena en una conocida discoteca de ambiente gay de la capital murciana. Ambos iniciaron una relación amistosa, en el curso de la cual el ciudadano italiano habría sacado a relucir lo fácil que sería sacar una buena tajada del domicilio de un conocido suyo, un hombre de avanzada edad, que residía en Molina de Segura y que, según había comprobado por sí mismo, tenía mucho dinero y valiosos cuadros decorando las paredes.
Los dos amigos se concertaron entonces, presuntamente, para acudir a casa del anciano y, con la excusa de ofrecerle relaciones sexuales, aprovechar para despojarlo de todos los objetos de valor de que pudieran apoderarse. En los planes, según parece deducirse de las investigaciones policiales, incluso llegaron a asumir la posibilidad de tener que acabar con la vida de la víctima. Algo que finalmente terminaría ocurriendo.
La muerte del vecino de Molina de Segura, cuya identidad no ha trascendido, fue espantosa. Mientras el joven archenero lo sujetaba para evitar que pudiera defenderse, el italiano le habría asestado, presuntamente, diversos golpes de kárate en el cuello, con el evidente objeto de fracturárselo y causarle la muerte. Pero su falta de pericia -al parecer, no es un experto en artes marciales- les habría obligado a colocarle a la víctima una bolsa de plástico en la cabeza y a anudársela en torno al cuello, lo que acabó determinando su fallecimiento por asfixia.
Los dos hombres procedieron entonces a registrar la vivienda en busca de dinero y otros objetos de valor y acabaron llevándose varios cuadros en unas bolsas de grandes dimensiones, de las que se habían provisto anteriormente. Todo apunta a que los autores del homicidio decidieron poner tierra de por medio y se marcharon un tiempo a Barcelona. Allí lograron colocar los cuadros aunque, eso sí, a cambio de apenas ochenta euros. Exiguo precio por la vida de un ser humano.
A lo largo de más de cuatro meses, los agentes del Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía han trabajado en silencio hasta dar con los presuntos autores del crimen. Los dos hombres ya mencionados han sido detenidos en las últimas horas, el italiano en Barcelona y su compinche en el domicilio de su padre, en Archena, y además ha sido arrestado otro vecino de Jumilla, de 28 años, cuyo grado de implicación en el crimen no ha trascendido.
Una completa confesión
Aunque las diligencias han sido declaradas secretas por parte del juez de Molina de Segura que lleva la instrucción del asunto, este periódico ha podido saber que las investigaciones están muy avanzadas y que el caso se da prácticamente por resuelto, pues alguno de los implicados habría confesado y habría realizado un detallado relato de la forma en la que dieron muerte al anciano, así como de las razones por las que cometieron el crimen.
El máximo responsable de la Jefatura Superior de Policía de Murcia, Carlos Llorente, confirmó ayer las detenciones y se limitó a señalar que «estamos trabajando en ello y el tema está muy avanzado», aunque se negó a confirmar o desmentir que uno de los arrestados se dedicara a la prostitución masculina.
Los sospechosos serán puestos a disposición judicial en las próximas horas. Todo apunta a que se verán imputados en un delito de asesinato con alevosía, al no haber tenido la víctima opción de defenderse.
02.10.10 - 01:00 - RICARDO FERNÁNDEZ MURCIA. / La Verdad
Mientras el joven de Archena sujetaba a la víctima, el italiano le asestó varios golpes de kárate en el cuello
Luego lo asfixiaron poniéndole una bolsa de plástico en la cabeza
«Conozco un viejo en Molina de Segura que está forrado de pasta». Con esa frase, pronunciada por un italiano de 36 años en los primeros días del pasado mayo, se activaba una perversa e invisible maquinaria que acabaría, poco después, con el brutal asesinato de un anciano en Molina de Segura.
Este hombre, quien aparentemente venía dedicándose desde tiempo antes a vender sus servicios sexuales a varones de Murcia y alrededores, acababa de conocer a un joven de Archena en una conocida discoteca de ambiente gay de la capital murciana. Ambos iniciaron una relación amistosa, en el curso de la cual el ciudadano italiano habría sacado a relucir lo fácil que sería sacar una buena tajada del domicilio de un conocido suyo, un hombre de avanzada edad, que residía en Molina de Segura y que, según había comprobado por sí mismo, tenía mucho dinero y valiosos cuadros decorando las paredes.
Los dos amigos se concertaron entonces, presuntamente, para acudir a casa del anciano y, con la excusa de ofrecerle relaciones sexuales, aprovechar para despojarlo de todos los objetos de valor de que pudieran apoderarse. En los planes, según parece deducirse de las investigaciones policiales, incluso llegaron a asumir la posibilidad de tener que acabar con la vida de la víctima. Algo que finalmente terminaría ocurriendo.
La muerte del vecino de Molina de Segura, cuya identidad no ha trascendido, fue espantosa. Mientras el joven archenero lo sujetaba para evitar que pudiera defenderse, el italiano le habría asestado, presuntamente, diversos golpes de kárate en el cuello, con el evidente objeto de fracturárselo y causarle la muerte. Pero su falta de pericia -al parecer, no es un experto en artes marciales- les habría obligado a colocarle a la víctima una bolsa de plástico en la cabeza y a anudársela en torno al cuello, lo que acabó determinando su fallecimiento por asfixia.
Los dos hombres procedieron entonces a registrar la vivienda en busca de dinero y otros objetos de valor y acabaron llevándose varios cuadros en unas bolsas de grandes dimensiones, de las que se habían provisto anteriormente. Todo apunta a que los autores del homicidio decidieron poner tierra de por medio y se marcharon un tiempo a Barcelona. Allí lograron colocar los cuadros aunque, eso sí, a cambio de apenas ochenta euros. Exiguo precio por la vida de un ser humano.
A lo largo de más de cuatro meses, los agentes del Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía han trabajado en silencio hasta dar con los presuntos autores del crimen. Los dos hombres ya mencionados han sido detenidos en las últimas horas, el italiano en Barcelona y su compinche en el domicilio de su padre, en Archena, y además ha sido arrestado otro vecino de Jumilla, de 28 años, cuyo grado de implicación en el crimen no ha trascendido.
Una completa confesión
Aunque las diligencias han sido declaradas secretas por parte del juez de Molina de Segura que lleva la instrucción del asunto, este periódico ha podido saber que las investigaciones están muy avanzadas y que el caso se da prácticamente por resuelto, pues alguno de los implicados habría confesado y habría realizado un detallado relato de la forma en la que dieron muerte al anciano, así como de las razones por las que cometieron el crimen.
El máximo responsable de la Jefatura Superior de Policía de Murcia, Carlos Llorente, confirmó ayer las detenciones y se limitó a señalar que «estamos trabajando en ello y el tema está muy avanzado», aunque se negó a confirmar o desmentir que uno de los arrestados se dedicara a la prostitución masculina.
Los sospechosos serán puestos a disposición judicial en las próximas horas. Todo apunta a que se verán imputados en un delito de asesinato con alevosía, al no haber tenido la víctima opción de defenderse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario