MADRID, 15 Oct. (OTR/PRESS) -El Congreso de los Diputados aprobó ayer la toma de consideración del proyecto de reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha envuelto en la polémica por la exigencia de que el trasvase Tajo-Segura caduque en 2015, un aspecto que cuenta con una firme oposición de las comunidades Mediterráneas.
Por este motivo, al presentarlo, el presidente castellano manchego, el socialista José María Barreda, ha querido subrayar que si el texto resulta "devaluado" o "modificado sustancialmente" pedirá su retirada. Finalmente, la toma de consideración obtuvo 315 votos a favor con sólo tres votos en contra, uno de UPyD y dos de sendos diputados populares de Murcia que podrían ser sancionados. Tras esta decisión, el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, anunció enmiendas socialistas en asuntos "problemáticos" del texto.
La polémica se inició durante la intervención de Barreda en el debate de toma de consideración de la reforma del Estatuto, en el que a pesar de recalcar su posición al diálogo y agradecer a PP y PSOE su esfuerzo para el entendimiento en las Cortes regionales, señaló que si el texto del Estatuto se aprueba "devaluado" pedirá su retirada. De este modo apuntó que espera "rigor y respeto" por este tema y añadió que si "el texto fuera modificado sustancialmente sin que los intereses de Castilla-la Mancha se vieran reconocidos" pedirá "a las Cortes regionales que lo retiren", y "seguiremos luchando", remató.
Con estas palabras se refería a la polémica del trasvase Tajo-Segura que ocupó prácticamente toda su exposición y que calificó de "ineficaz, inservible y obsoleto a corto y medio plazo". Así, detalló que, según los datos del Gobierno central, el agua trasvasada supone un 60 por ciento de las aportaciones naturales a la cabecera del río, lo que se une a que "llueve poco y los aportes de cabecera seguirán disminuyendo". "La escasez no es un problema coyuntural sino estructural, no somos insolidarios, simplemente necesitamos agua", argumentó insistiendo en que la ley afirma que la cuenca cedente tiene prioridad sobre la cuenca receptora". "El trasvase se concibió para sacar el agua sin dejar una sola gota de agua por el camino atravesando tierra sediente y fértil, cruzando pueblos a los que se abastecía por cisterna", explicó el presidente autonómico que abogó por conseguir en toda España "otra cultura del agua" que calificó como "una necesidad y no como un capricho".
En el debate también participó el portavoz del Grupo Socialista, quien adelantó el voto positivo de su grupo como muestra de "respeto" a la iniciativa legislativa avalada por las Cortes castellano manchegas. Sin embargo Alonso quiso dejar claro que los socialistas tienen previsto presentar las enmiendas que consideren oportunas para atajar aquellos asuntos "problemáticos" que aborda el texto en defensa del interés general, en referencia al polémico trasvase.
En este sentido, el diputado popular, Federico Trillo, afirmó que desde su formación también "se enmendarán" las peticiones del Estatuto sobre el agua ya que su apoyo a esta posible reforma "no se trata de un sí al contenido integral de la redacción y menos aún a las cláusulas relacionadas con el trasvase Tajo-Segura", sino que, por el contrario, al admitirlo a trámite "lo que se hace es dar oportunidad de enmendar aquellos preceptos que no satisfacen los intereses generales acertadamente".
DIPUTADOS MURCIANOS VOTAN EN CONTRA
Tras las exposiciones, se llevó a cabo la votación de los diputados en el Congreso que finalizó con la aprobación de la toma de consideración por 315 votos a favor, 3 en contra y ninguna abstención. Los votos contrarios se produjeron por parte de la parlamentaria Rosa Díez, de UPyD, y por dos diputados populares murcianos, que rompieron la disciplina de su partido. Uno de ello, Arsenio Pacheco, explicó que lo hizo por "conciencia" y "coherencia con las posiciones en materia de agua que ha tenido hasta ahora, teniendo en cuenta que Murcia es una de las comunidades afectadas por la exigencia de que el trasvase Tajo-Segura caduque en 2015.
Pero, a pesar de sus razones, los dos diputados no se librarán de una sanción por romper la disciplina popular y así lo señaló el miembro de la dirección del PP, Arturo García Tizón, quien señaló a la prensa que el grupo Popular estudiará cuál sería la sanción que se les impondrá. "Si se ha producido alguna ruptura de disciplina, indudablemente se tomará buena cuenta de ello y adoptará las medidas que internamente se tienen previstas para estos casos", manifestó. Por su parte, la secretaria general del principal partido de la oposición eludió hablar sobre este tema y se limitó a decir que es "un gran día" para Castilla-La Mancha. "El PP va a hacer todo lo posible por el interés general de Castilla-La Mancha en el seno de nuestras leyes y nuestra Constitución", subrayó.
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