Entre ellas la de Archena
Las instalaciones cumplen con las condiciones de higiene y aforo, pero fallan en la información al usuario
09.08.12 - 08:40 -
J. G. Badía | murcia/ La Verdad
Provistos de bañador, toalla, chanclas y un buen formulario, los miembros de la Asociación Murciana de Consumidores y Usuarios, Consumur, se han dado un chapuzón en doce piscinas públicas de la Región para elaborar un estudio de mercado sobre las condiciones sanitarias, técnicas y de seguridad que presentan estas instalaciones. En total han evaluado once variables, la mayoría, recogidas en el Decreto 58/92, de la Consejería de Sanidad, que regula el funcionamiento de estos espacios.
El botón de muestra escogido por Consumur para elaborar el estudio, 12 piscinas, es relativamente reducido teniendo en cuenta que en la Región hay 173 instalaciones descubiertas de uso público, entre las que se incluyen las de titularidad municipal, las explotadas por empresas privadas y clubes deportivos. El documento recoge datos de interés de las piscinas de Fuente Álamo, Lorca, Fortuna, Mula, Molina de Segura, Abarán, Archena, San Pedro del Pinatar, Alhama de Murcia, Jumilla, Caravaca de la Cruz y Murcia. Entre ellos, los precios que presenta el sector, con un coste medio del baño para adultos de 2 euros y 60 céntimos.
Las piscinas más económicas de este listado son las de Fuente Álamo, Mula, Fortuna, Abarán, San Pedro y Caravaca, que ofertan el baño para adultos por dos euros. Las más caras, según Consumur, son las de Lorca por 4 euros y 10 céntimos y Archena con 3 euros y 40 céntimos. Las variables analizadas en el estudio fueron el precio de las entradas; las condiciones de los vasos y duchas; los ratios de los flotadores salvavidas; el cumplimiento del aforo; el estado de servicios, vestuarios, aseos y cantinas; el número de socorristas por vaso; la información que se facilita al usuario y la aplicación del reglamento de régimen interno.
A juicio de la directora del área de Comunicación de Consumur, Belén Rodríguez, el mayor incumplimiento de estas instalaciones es la accesibilidad que exige la ley. «A pesar de que los recintos analizados son accesibles para personas con discapacidad, luego el vaso de la piscina no lo es». Es decir, fallan en el aspecto clave, según criticó Rodríguez. «No tiene sentido que haya entradas accesibles y aseos adaptados, si después una persona discapacitada no tiene ninguna plataforma para poder acceder al vaso de la piscina. Un minusválido entra a la instalación, pero luego no puede bañarse». De las visitas realizadas entre el 11 y el 23 de julio, Consumur comprobó que solo Murcia Parque cumple con el parámetro de la accesibilidad, cuenta con rampas de acceso a los vasos para los bañistas de movilidad reducida y una grúa para discapacitados.
Suspenden Mula y San Pedro
En el capítulo de seguridad e higiene, Consumur destaca como aspecto positivo que, aunque la normativa exige que haya dos flotadores en los vasos de la piscina para adultos, «hemos verificado que el 67% de las piscinas visitadas también tienen un flotador para los vasos infantiles». De esta forma, la media de salvavidas es de tres y la de socorristas, de uno por piscina, tal y como fija la ley. Aunque Consumur reconoce que «encontramos dos socorristas en aquellas instalaciones que tenían más de dos vasos para el baño».
Existe una proporción de siete duchas por piscina y el aforo se respeta en el 100% de los casos. Pero la «otra irregularidad» detectada en las piscinas, que denuncia Consumur en su estudio, es el de la información a los usuarios. Según expuso Belén Rodríguez, en el 66,7% de los casos «no hemos encontrado un cartel indicador de que existen hojas de reclamaciones», y el 25% de estas instalaciones «no dispone de la información sobre el precio del baño a la entradas».
El presidente de Consumur, Roberto Barceló, destaca que «Alhama, con cuatro incumplimientos, y Murcia, con tres, son las piscinas que más respetan la normativa. Por otro lado, Mula y San Pedro del Pinatar son las que más incumplen la normativa, y con diferencia». En concreto, con 16 y 17 «incumplimientos», respectivamente, frente a la media de infracciones del Decreto 58/92 que «es de nueve», y de que en Lorca todavía se aprecian algunas obras a causa de los seísmos.
Aunque Rodríguez y Barceló calificaron «de aceptable» la situación de las piscinas con respecto a la normativa, estos datos serán facilitados a la Dirección General de Consumo para que ponga «remedio». Porque Consumur advierte de que en el mes de septiembre volverá a chequear las piscinas. Dicho queda.
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